Llegar tarde está simplemente prohibido. Llegar a la hora es la condición mínima de cualquier encuentro, por lo tanto llegar tarde será valorado como irresponsabilidad o persona poco seria. Normalmente se suele comer temprano, entre las 12:00 a 12:30, a esta hora los restaurantes ya se encuentran en plena actividad. En Suiza la gran mayoría pagan renta por sus departamentos, comprar es muy caro y solo algunos tienen el privilegio de vivir en casa propia. Muchos jóvenes comparten sus departamentos, se reparten en habitaciones y se organizan con los gastos. No importa si se conocen o no, cada uno vive en su metro cuadrado sin molestar a los demás. Las bicicletas son utilizadas con frecuencia por la población suiza. Es normal ver a personas dirigiéndose a sus trabajos, estudios o simplemente paseando por las calles o parques.
Los semáforos son respetados al extremo. Si te encuentras en una esquina y tiene luz roja, pero no hay nada que venga por la calle, no te muevas, hasta que cambie a la luz verde. En Suiza todo funciona entre los parámetros del sí o no, y los latinos jugamos entre el sí, no y tal vez. La última alternativa es la que provoca la mayor parte los conflictos culturales. Al momento de entrar en contacto con Suiza piensa dual, es si o es no, porque en el medio de estas dos alternativas no existe nada.
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